2025Emmanuel Mounier 1905-1950 - Series

El 24 de marzo de 2025, La Poste emitirá un sello con la imagen del filósofo Emmanuel MOUNIER con motivo del 120 aniversario de su nacimiento.

Emmanuel Mounier nació en Grenoble el 1 de abril de 1905 en el seno de padres modestos de ascendencia campesina.

Allí estudió filosofía, marcado por la enseñanza y la amistad de Jacques Chevalier, autor en particular de Entretiens avec Bergson.

Continuó su preparación para la agregación de filosofía en París, que obtuvo en 1928, a la edad de 23 años.

El descubrimiento del pensamiento de Charles Péguy le llevó a abandonar una carrera académica prevista de antemano y a fundar, con algunos amigos, en 1932 la revista Esprit, una revista y un centro de estudios internacional.

"Algunos hombres, en este mundo convulso, vienen a nosotros como niños con los ojos llenos de milagros. "Este retrato de Péguy que nos ofrece Mounier es en realidad su propio retrato.

Hombre de conversación y meditación, se embarcó sin embargo, a los 27 años, en una aventura que sabía que no tenía retorno y aceptó, para sí y su familia, los riesgos de una vida precaria. Impulsado por un profundo sentido de su vocación, quiere contribuir con su testimonio y sus acciones a hacer del mundo un lugar más humano: “Rehacer el Renacimiento” es el extravagante título de su primer artículo en su joven revista.

Mounier, de hecho, analiza los desórdenes económicos y sociales de los años 1930 como el resultado de una crisis de civilización, nacida de un error sobre el hombre. Siguiendo al filósofo alemán Max Scheler, renueva la noción de personalismo y la convierte en el fundamento de su acción.

Mounier participó también hasta su muerte el 22 de marzo de 1950, en todos los compromisos que marcaron a Francia y al continente europeo: la denuncia de los acuerdos de Munich, la defensa de la República Española, la Resistencia, la condena de la opresión colonial, la participación en la construcción europea.

Según su amigo el filósofo Paul Ricœur, Emmanuel Mounier poseía una virtud muy rara, que combinaba fuerza y ​​generosidad, lo que lo convertía en un hombre a la vez irreductible y devoto.