No existe sociedad en la que no existieran algunos tipos de juegos que adoptaban la forma de un juego deportivo. Ya en el antiguo Egipto disfrutaban del boxeo, la lucha libre y el tiro con arco. En los monumentos faraónicos de Egipto hay dibujos creados hace dos mil años que representan competiciones de tira y afloja, natación y otras disciplinas. Por esos dibujos, muchos creen que fueron los egipcios quienes inventaron las reglas de numerosos deportes, porque entonces ya tenían algo parecido a las camisetas de hoy y entonces los ganadores recibían premios. El deporte era importante en las civilizaciones antiguas, y lo es también hoy. Hoy, realmente tiene valor en la vida y se ha convertido en un fenómeno social global.
Es cierto que el juego siempre ha tenido importancia y no solo es una característica de la sociedad moderna, sino también de las sociedades primitivas, porque ese juego era parte integral de su trabajo, religión y filosofía de vida. Hoy, gracias a los medios de comunicación, ciertos eventos deportivos se han vuelto mundialmente populares, y en el pasado, las noticias deportivas se obtenían de formas diferentes a las actuales, porque no había televisión ni Internet. Desde los corredores de maratón hasta finales de la Edad Media, la única forma de transmitir mensajes a largas distancias eran las palomas mensajeras o los correos al servicio de gobernantes, jefes militares y señores. A pesar de todo, el deporte siempre ha sido un pasatiempo, una vía de escape de la vida cotidiana. Hemos sido testigos de que incluso hoy en día, muchos espectadores se olvidan de sus preocupaciones cuando se sumergen en la acción deportiva que se muestra en las pantallas de televisión. Por eso el deporte perdura, porque no es solo un juego y entretenimiento, sino un espectáculo y un fenómeno de la vida cotidiana. Los deportes y los juegos deportivos siempre expresan el "espíritu" mismo de la sociedad a la que pertenecen.
