Santiago Ramón y Cajal (1852-1934), Premio Nobel de Medicina en 1906, sentó las bases de la neurociencia moderna analizando micra a micra la estructura del sistema nervioso y demostrando la independencia de la célula nerviosa, base de la teoría neuronal. Fue catedrático en Valencia, Barcelona y Madrid, y en su obra Reglas y consejos sobre investigación científica manifestó: «La más pura gloria del maestro consiste, no en formar discípulos que le sigan, sino en formar sabios que le superen».
En 1902 inició la Escuela Neurohistológica Española, también llamada Escuela Cajal o Escuela de Madrid, que gozó de gran prestigio internacional. A ella y a sus primeros seguidores aludió Cajal en su obra Recuerdos de mi vida:
Siempre me preocupé, sobre todo después que el Estado puso en mis manos decoroso y bien provisto laboratorio, de fundar una escuela genuinamente española de histólogos y biólogos […]. Me es muy grato nombrar a mi hermano, P. Ramón Cajal, a F. Tello, a N. Achúcarro, a Domingo Sánchez, a Rodríguez Lafora, a Del Río-Hortega, a Fernando de Castro y a Lorente de Nó. Este grupo de entusiastas trabajadores acabaron ya su formación y saben caminar solos y triunfar en el terreno de la investigación […]. Han sido mis discípulos, en el amplio sentido de la palabra. Todos han vivido algo mi vida y participado de mis emociones, todos me han oído pensar, con palabra entrecortada, durante el ensimismamiento de la atención y en los breves paréntesis del trabajo febril.
Estos pioneros siguieron la estela de Cajal y llegaron a ser eminentes científicos con importantes líneas de investigación; incluso Rafael Lorente de Nó y Pío del Río-Hortega estuvieron varias veces nominados al Premio Nobel.
A Cajal y a su escuela aludió el científico británico Charles Sherrington, Premio Nobel de Medicina en 1935: «Si alguna vez un científico creó escuela, ese fue Cajal».
Con la emisión de esta hoja bloque Correos homenajea, en el marco del Año de Investigación Santiago Ramón y Cajal, al ilustre científico español y a quienes fueron los pilares vivos de la Escuela Neurohistológica Española.
